El otro día por fin pude ver una de las películas que más ganas tenía de ver, "¡madre!", lo nuevo de Darren Aronofsky (Réquiem por un sueño, cisne negro), protagonizado por Jennifer Lawrence y Javier Bardem. Es una de las películas más polémicas del año y por ello, además de porque soy una gran fan de la filmografía de Aronofsky, tenía muchísima curiosidad por ir a verla.
Para quien no lo sepa, la película trata de un matrimonio (Lawrence y Bardem) que se acaba de mudar a una nueva casa y, mientras que ella está concentrada en la remodelación de dicha casa, el es un escritor que se encuentra buscando inspiración para su nuevo libro. Entonces reciben la inesperada visita de un señor enfermo (Ed Harris), al que el personaje interpretado por Bardem invita a quedarse. Posteriormente llega su mujer (Michelle Pfeiffer) y la cosa se empieza a poner más turbia. Hasta aquí es lo que puedo contar sin hacer ningún spoiler, quienes no hayáis visto la película y tengáis intención de hacerlo, recomiendo que no sigáis leyendo.
En general, la película me pareció buenísima, sobre todo por la originalidad del guion( te tiene todo el rato en vilo y, cuando piensas que la cosa no puede ir a peor, va a peor) y por la gran interpretación de los actores. Bardem ya me gustaba mucho, pero en este papel lo he visto muy distinto a otros trabajos suyos, sobre todo por lo impredecible que es su personaje, yo no me terminaba de decidir si era bueno o malo hasta, obviamente, al final, que terminé cogiéndole asco. Jennifer Lawrence, por otra parte, no me parecía mala actriz, pero tampoco me entusiasmaba demasiado y soy de las que piensa que su Oscar por "el lado bueno de las cosas" no fue merecido, sin embargo, me parece que en esta peli se luce muchísimo más y que es, en mi opinión, el mejor trabajo de su carrera.
Por otra parte, me parece que mezcla unos temas muy interesantes: el amor interesado del personaje de Bardem por el de Lawrence y el agobio que siente ella por hacerlo todo bien, la religión y el fanatismo (que se ve perfectamente en los espeluznantes últimos minutos), que, como se ve, puede llevar a una persona a hacer cualquier cosa.
En general, como ya he dicho antes, me parece una gran película comparable a las otras películas del director. Eso sí, no es recomendable para público sensible.
